Todo lo que necesitas saber para mantener sano y feliz a tu pequeño compañero verde.

Guía de cuidado del Marimo

Cambio de agua

Cambio de agua

Cambia el agua de tu marimo cada 10 - 14 días. Usa agua filtrada o agua de la llave que haya reposado al menos 12 horas, así el cloro se evapora y no afecta a tu marimo.

Luz indirecta

Luz indirecta

Como vive en las profundidades de los lagos, no necesita mucha luz. Un lugar con luz indirecta está perfecto. Puedes colocar a tu marimo cerca de una ventana pero evita siempre el sol directo.

Hazlo girar con cariño

Hazlo girar con cariño

En la naturaleza, las corrientes lo mantienen en movimiento. Cuando cambies su agua, gíralo suavemente entre tus manos para que conserve su forma redonda.

Cambiar el agua regularmente es fundamental para su salud.

Como realizar el cambio de agua

Frecuencia:

Cada 14 días (o cada 7 en verano).

Agua ideal:

Agua de la llave reposada 12–24 h, o agua purificada sin gas.

Procedimiento:

Retira el marimo con las manos limpias, vacía el frasco, enjuágalo sin jabón, llena con agua nueva y vuelve a colocar el sustrato y el marimo. Puedes aprovechar para apretarlo suavemente entre tus manos y rodarlo, como si fuera una esponja, para conservar su forma redonda.

Cómo preparar su entorno

Cómo preparar su entorno

Los marimos son organismos acuáticos delicados que requieren un entorno simple, pero bien cuidado. Lo ideal es utilizar un recipiente de vidrio con agua de la llave previamente reposada al menos 12 horas (para eliminar el cloro). También puedes usar agua purificada sin gas.

Temperatura ideal: entre 10 °C y 24 °C.
Evita temperaturas extremas o cambios bruscos: el calor excesivo puede dañarlos, y el frío extremo los adormece.

Luz: los marimos viven naturalmente en el fondo de lagos poco iluminados. Necesitan luz indirecta (idealmente natural), pero nunca luz solar directa, ya que puede recalentar el agua o provocar quemaduras. También pueden vivir con luz artificial tenue.

¿Recipiente abierto o cerrado?

¿Recipiente abierto o cerrado?

Ambas opciones son posibles:

Los recipientes abiertos como las peceras permiten mejor oxigenación, lo que favorece la fotosíntesis (¡verás burbujitas!).

Los frascos cerrados son más decorativos y requieren menor evaporación, pero asegúrate de abrirlos de vez en cuando para ventilar y evitar exceso de humedad acumulada.

Cuidado con el sol y las temperaturas

Cuidado con el sol y las temperaturas

Evita dejar el marimo cerca de estufas, ventanas con sol directo, o superficies que acumulen calor. El agua puede calentarse rápidamente, afectando su salud.

Si hace mucho calor (más de 26 °C), puedes añadir un hielo envuelto en una bolsita al agua, o dejar el frasco unas horas en el refrigerador. Si hace frío (menos de 8 °C), simplemente protégelo del exterior, sin exponerlo a corrientes heladas.

¿Y si no flota ni se mueve?

¿Y si no flota ni se mueve?

Es completamente normal que tu marimo no flote. Muchos se quedan en el fondo. Flotar depende de las burbujas generadas por la fotosíntesis y del equilibrio de aire en su interior.

Para estimular el movimiento:

  • Coloca el frasco en un lugar más luminoso (indirectamente).
  • Cambia el agua para oxigenarla.
  • Rodarlo entre tus manos puede ayudarlo a liberar burbujas atrapadas.

  • Las manchas marrones o decoloradas pueden deberse a:

    ☀️ Exposición al sol directo.
    💧 Agua sucia o sin cambiar por mucho tiempo.
    🌿 Acumulación de sedimento o algas externas.

  • Solución:

    Lávalo bajo el chorro de agua fría con delicadeza, puedes usar un cepillo suave si es necesario. Ruedalo entre tus manos para renovar su forma. Si la mancha persiste, puedes cortar ligeramente la parte afectada con tijeras limpias.

  • Marimo desarmado o irregular

    Posible causa

    Manipulación excesiva, agua caliente

    Solución

    Recorta la parte dañada y déjalo reposar en agua fría

  • Agua con olor o turbia

    Posible causa

    Agua sin cambiar por mucho tiempo

    Solución

    Cambia completamente el agua, lava el frasco y al marimo

  • Marimo muy blando o deshecho

    Posible causa

    Podredumbre por calor o suciedad

    Solución

    Difícil de recuperar. Intenta con agua fría y limpieza profunda

  • Aparecen filamentos u otras algas

    Posible causa

    Exceso de luz o nutrientes

    Solución

    Lava el marimo, reduce la luz y cambia el agua más seguido

Preguntas frecuentes

¿Puedo tener varios marimos en el mismo frasco?
Sí, puedes tener más de un marimo en el mismo frasco si el espacio es suficiente y el agua se mantiene limpia.
¿Qué tipo de agua es mejor?
Lo ideal es usar agua mineral sin gas o agua de la llave reposada 12 - 24 h, para eliminar el cloro. Nunca uses agua con gas, con cloro activo o destilada pura.
¿Se pueden mezclar con peces?
No lo recomendamos. Algunos peces pueden mordisquear o dañar el marimo. Además, las condiciones ideales para peces (temperatura, pH, oxígeno) pueden no coincidir con las que necesita el marimo.
¿Puedo ponerle piedritas o decoraciones?
Sí, puedes añadir piedras decorativas, conchas u otros elementos, siempre que estén bien limpios y no alteren la composición del agua.
¿Necesita fertilizantes?
No. El marimo sobrevive sin fertilizante.
¿Qué tamaño de frasco necesito?
Un frasco de 150 a 400 ml es suficiente para marimos pequeños. Para marimos de más de 3 cm, lo ideal es un recipiente de 500 ml o más, con boca ancha para facilitar la entrada de luz y oxígeno.
¿Qué hago si deja de ser redondo?
Después de limpiarlo, puedes darle forma suavemente con las manos. Con una rotación frecuente y condiciones adecuadas, poco a poco volverá a su forma esférica natural.